💪🏽 Hazlo igual. Aunque no estés lista.
Hay momentos en los que el miedo aparece disfrazado de prudencia.
De esa voz que te dice: “no es el momento”, “espera un poco más”, “prepárate mejor”.
Yo también la he escuchado muchas veces.
Y he aprendido que la valentĂa no es no tener miedo,
sino hacer las cosas a pesar de él.
Ser una mujer valiente no siempre es fácil.
El camino está lleno de etiquetas, de expectativas y de juicios.
Pero también está lleno de oportunidades para elegirte, una y otra vez.
Hay formas de valentĂa que todos reconocen:
💡 No quedarte callada cuando algo no está bien, aunque incomode.
đź’ˇ Dar la cara por alguien, aun sabiendo que puede tener un costo.
💡 No permitir que te falten al respeto, sin importar quién sea.
Pero hay otras formas de valentĂa, más silenciosas, que muchas veces pasan desapercibidas:
đź’ˇ Reinventarte y seguir creciendo, aunque otros crean que ya es tarde.
💡 Aceptar un reto que te asusta, porque sabes que crecerás al intentarlo.
💡 Decir “no sé”, “me equivoqué” o “necesito ayuda”, con humildad y firmeza.
Todo eso tambiĂ©n es valentĂa.
Aunque no salga en los titulares.
Aunque nadie te aplauda.
Porque la valentĂa no siempre hace ruido.
A veces se parece más a una respiración profunda antes de dar el paso,
a un mensaje que envĂas temblando,
a un “sĂ” que dices mientras todo dentro de ti tiembla un poco.
Si hoy algo te da miedo… hazlo igual. 👊🏽
No sola, pero hazlo.
Pide ayuda, busca apoyo, rodéate bien.
Ordénate, enfócate, y avanza a tu ritmo. 🌱
Porque la valentĂa tambiĂ©n está en eso:
en no cargarlo todo sola.
En seguir, aunque no estés lista.
Y en creer, aunque aĂşn no lo veas claro.