Abraza tu síndrome del impostor y sigue adelante
💥 Abraza esa primera vez: lo que hoy te incomoda, será lo que mañana te haga crecer.
El síndrome del impostor, ese que no quieres que esté presente, es especialmente fuerte esa "primera vez".
Sentirlo es señal de que estás aprendiendo, que estás haciendo algo nuevo, y sobre todo, que te importa hacerlo bien. 💙
A algunos los paraliza, a otros les susurra al oído llenándolos de dudas. Hoy quiero recordar algunas de mis “primeras veces”, porque es posible mantenerlo a raya y avanzar: 💪
👉 Cuando creé un producto verde que compensaba emisiones de vehículos, en una época en que la compensación apenas era un concepto.
👉 Cuando lideré el equipo de Marketing Directo, que terminó sentando las bases para el marketing digital de hoy.
👉 Cuando fui responsable de los canales digitales de una organización que nunca había tenido canales digitales.
👉 Cuando inicié un laboratorio de innovación, sin conocimientos previos en Design Thinking ni agilidad organizacional.
👉 Cuando emprendí sin haber trabajado nunca en una empresa pequeña, sin saber con certeza para qué era realmente buena.
El síndrome del impostor estaba ahí en cada uno de esos momentos. Pero aprendí a darle su lugar:
✅ Lo escuché sin dejar que me detuviera.
✅ Me apoyé en expertos cuando pude. Solos se puede, pero acompañados se llega más rápido.
✅ Aprendí en el camino. Si me equivocaba, viraba rápido y seguía adelante.
✅ Recordé mis logros, hasta los más pequeños. Porque cuando la voz del impostor aparece, recordar lo que has hecho te devuelve la claridad y el impulso para avanzar.
Mirando hacia atrás, me doy cuenta de que el síndrome del impostor no era mi enemigo. Fue un compañero incómodo que me ayudó a mantenerme alerta, a aprender más y a mejorar cada vez. 🎯
¿Cual es esa primera vez que quieres recordar?
#PersonalTransformation #Resilience #ImpostorSyndrome